21.11.06

De favoritismos, nada

El Sant Andreu está sufriendo decisiones arbitrales que le han perjudicado en ocasiones notablemente. Sin entrar en penalties, faltas y demás, analizamos las expulsiones que vienen siendo comunes en cada partido, pese a que el Sant Andreu no es para nada un equipo duro ni violento, todo lo contrario.
En Orihuela, Jordi Martínez recibió una tarjeta roja por supuesta agresión a Chando, delantero local. Era el '30 y el resto de partido se jugó con uno menos y sin la referencia ofensiva. Tras la derrota, aunque bien es cierto que los alicantinos marcaron antes de la expulsión un gol, el club alegó con pruebas al Comité de Competición y éste le perdonó la sanción de un partido sin jugar. Pese a las quejas de algunos medios del Alcoyano, anotó el gol en el empate (1-1) ante el equipo de la moral. Pero en ése partido se produjo otra expulsión para los de Jaume Creixell, quizás la única justa de las sufridas ésta temporada. El aragonés David Charles derribó a un delantero blanquiazul claramente dentro del área cuando éste se disponía a rematar.
Tras el partido en Badalona (2-0), el Miapuesta Figueres se presentó en el Narcís Sala con sed de puntuar. Juan Antonio Godino recibió una amarilla dudosa, y en una jugada en el que el línier señaló fuera de juego aunque las imágenes de TV demuestran que no lo era, Godino impacta el balón cuando el árbitro vasco Azkue Otegi, muy lento, señala la posición antirreglamentaria. Por si fuera poco, considera desplazamiento innecesario del balón y la segunda amarilla. En ésta ocasión, pese a la alegación con vídeo de la jugada, el Comité hizo oídos sordos.
Finalmente, antes de ayer, el Sant Andreu sufrió otra expulsión más. Javier Ortega vió la segunda en una discutida falta que fué castigada en exceso por el trencilla canario de turno.
El Sant Andreu no es un conjunto violento, duro ni marrullero, pese a ello ha visto ya tres expulsiones en cuatro partidos mientras que hay conjuntos que, basando su capacidad en la dureza, no presentan estos números.