27.7.06

La nueva camiseta y posible fichaje

El Sant Andreu empezó la temporada 2006-07 y estrenó también camiseta. A las novedades de los Javi Ruiz, David Malo, Santi Asensio, Navas, Cervián, Santamaría, ... se sumó otro aspecto importante del club: la camiseta. Es igual que la del año pasado, con cuello de pico y negro y en las mangas una franja negra que le da un toque distinto. El escudo es bien visible en el centro del pecho y cosido. Pese a ser un detalle, el borde negro de las mangas da un aspecto novedoso en la gloriosa zamarra andreuense.
Por otra parte, ha aparecido una información en Radio Puerto Real en la que se tiene constancia de la presencia durante esta tarde en las oficinas del club de Gabriel Miguel Bordi, delantero italo-argentino del Linares C.F. de 31 años que tenía que firmar por el equipo portuense y que parece que ha sido objetivo del Sant Andreu. Su apodo es el Tanque, fiel reflejo de sus características como futbolista. El Puerto Real tiene problemas económicos que le pueden condenar a descender y su presidente ha dimitido, por lo que uno de los delanteros más destacados del Linares durante la última temporada puede ser desde esta tarde jugador de la U.E. Sant Andreu. Aqui tenemos un perfil del jugador, que mide 1'82 m. y pesa 81 kg. Militó en el Nápoles (99-2000), tras jugar en Instituto Central y Newell's Old Boys, y tras el mítico club italiano vagó por el Quilmes, Defensor Sporting de Uruguay, el español Polideportivo El Ejido, donde actuó durante una temporada, y al Sporting Club portugués. En la temporada 2.003-04 firmó por el Logroñés. Ya en el Linares, el delantero marcó un gol al Talavera tras salir de suplente y le marcó multitud de cortes de manga a su propio entrenador por lo que fué exulsado del terreno de juego y multado económicamente por su propio club. Una de tantas anécdotas de un jugador que puede ser nuevo delantero del Sant Andreu esta tarde.
Finalmente, el Granada se ha adelantado y Bordi seguirá en Andalucía un año más. Las altas pretensiones del jugador parecen ser las altas pretensiones del jugador.